Will Rodríguez: Memorias en Rosa y Violeta. Cuando la memoria falla, el amor sobrevive

jueves, octubre 17, 2024

Memorias en Rosa y Violeta. Cuando la memoria falla, el amor sobrevive


Árbol genealógico, diario personal, bitácora de vida, álbum familiar, baúl de recuerdos, historia y evolución de una familia, una ciudad, una colonia… Eso y más representa Memorias en Rosa y Violeta, primera novela de Miguel Gallareta Negrón en la que el autor revela grandes secretos y convierte a los lectores en cómplices de un pasado tormentoso y un presente de resignación.

Resignación ante la triste enfermedad de Rosa, la madre que también fue hija, hermana y nieta de una numerosa familia integrada por personas tan diferentes entre sí como entrañables e inolvidables. El Alzheimer, que en el más leve de los casos altera y sacude la estabilidad emocional y económica de los familiares más cercanos, es el hilo conductor de esta historia que se desarrolla en la ciudad de Mérida y la costa de Yucatán, pero con nítidos paisajes de la ciudad de México, Guadalajara y el puerto de Veracruz. 

Con sobria y elegante narrativa, Miguel Gallareta Negrón descubre las heridas provocadas por una casta divina de rancias costumbres que, por fortuna, ahora están en extinción. La historia de Rosa no inicia con su nacimiento, sino con sus antecedentes del siglo XIX en una elegante hacienda yucateca. Ahí es donde surge una estirpe de mujeres valientes, algunas muy apegadas a los convencionalismos de la época que les tocó vivir, pero otras que, como Rosa y Violeta, rompieron el molde de hijas obedientes y esposas sometidas para alzar la voz y rebelarse ante las injusticias sociales e intrafamiliares. 

El siglo XX en Yucatán comienza con grandes acontecimientos sociales que el autor no pasa por alto, como es el caso de la lucha emprendida por el político Felipe Carrillo Puerto, la actividad artística e intelectual de los años 20, las logias masónicas y el movimiento socialista que, entre otros sucesos de gran trascendencia sociocultural, implementó el derecho al voto de las mujeres. Rosa proviene de una familia en la que todo ello fue motivo de análisis, crítica y reflexión. Huérfana de madre desde muy pequeña y heredera de una gran fortuna, siendo muy joven decide casarse y formar su propia familia, a pesar de que el hombre que ha elegido no es del total agrado de sus abuelos, su padre lejano y demás parentela.

La vida de Rosa es por demás interesante. Las páginas del libro pasan ligeras ante la destreza narrativa del autor. Capítulos breves, con flashbacks de sus recuerdos y los pensamientos del narrador ante la enfermedad de su adorada madre, otorgan a esta lectura un sabor reconfortante y adictivo. Rosa nos cuenta su vida antes de que la memoria le falte. Sospecha, aunque su esposo e hijos traten de ocultárselo, que la demencia que ha atormentado a sus antepasados desde hace varias generaciones, ahora conocida como Alzheimer, comienza a apoderarse de ella y no habrá poder divino −ni científico− que logre exorcizarle semejante mal.

La fiesta de sus 15 años, su primera ilusión amorosa en un barco, su relación con Mamá Grande, su sencilla pero hermosa boda, las primeras calles y familias de la colonia Alemán de la ciudad de Mérida, las altas y bajas de su matrimonio, su accidentada luna de miel, los nacimientos, problemas y satisfacciones de sus nueve hijos, su ayuda a los matrimonios en crisis, sus viajes y anécdotas con los vecinos, son relatos presentados con lujo de detalles y que provocan, en ocasiones, alguna lágrima o una carcajada. Lo cierto es que Rosa tuvo y tiene una personalidad arrolladora, actuó siempre con firmeza y puso en su lugar a quien lo merecía.

Por ello, gracias a estas Memorias en Rosa y Violeta, aprendemos a quererla, a comprenderla, a valorar su valentía y admirar su labor de esposa, guía espiritual y madre de hombres y mujeres de bien. La desaparición gradual de sus recuerdos y el deterioro de su capacidad de valerse por sí misma en las cuestiones más elementales constituye, además de un motivo para la reflexión, un espejo en el que podemos ver la posibilidad de enfrentar una desconcertante enfermedad que sólo puede ser tratada con amor.

Felicito al autor por este enorme y sensible trabajo de investigación, y a la editorial Desde La Periferia por apostarle a un proyecto literario de gran interés para cualquier tipo de persona, pero sobre todo para quienes tienen algún amigo o ser querido con Alzheimer. Agradezco la oportunidad de disfrutar de este libro y aprender más sobre este padecimiento humano.